LIBERTAD DE EXPRESIÓN EN MIS REDES SOCIALES

¿Verdad o Mito?

La libertad de expresión es una de las prerrogativas mas comunes que tienen las personas en sus redes sociales, específicamente están diseñadas para facilitar el ejercicio de este derecho. Pero es muy común ver personas cuestionando nuestras publicaciones, estados, escritos o simplemente artículos varios que compartimos por puro placer o porque simple y llanamente no nos viene en gana callarlo.

Necesitamos hacer eco de un flagelo que nos ataca silenciosamente, la GENTE se molesta por lo que publicamos, la GENTE se hiere cuando expresamos lo que sentimos, la GENTE no quiere que digamos lo que en verdad pensamos. Y usted diría pero y ¿por qué? si todos nos beneficiamos de ese derecho. 

Porque no es cierto que existe el ejercicio de la libre expresión y mucho menos cuando usamos nuestro espacio para expresar verdades irrefutables, cuando basamos nuestros argumentos en pruebas contundentes. No suelo publicar mucho mis vivencias muy personales en las redes, pero sí mi perspectiva con relación a mi entorno y a diversas circunstancias, justamente lo que hago en este blog, claramente que cuando lo hago es porque tengo mis razones y es porque defendería mi postura en cualquier escenario y con cualquier persona. 

Lo que no debemos es caer en el ridículo de mezclar nuestras situaciones personales con nombres y apellidos y que el mundo sepa que tenemos una vida desordenada, ahí sí es valido que cualquier persona nos aborde, pues hemos invitado al mundo a que se inmiscuya. 

En tal razón, cuando alguien te cuestione o quiera manipular o condicionar lo que decides compartir en tus redes, hazle un pare, ponle un alto a tal atrevimiento, no te pongas a discutir con ellos, ni te rebajes a explicar con lujos y detalles el motivo por el cual lo hiciste. Simplemente con amabilidad y cortesía hazles entender la libertad de expresión que tienes en tu condición de persona, la titularidad que tienes del manejo de tus redes y de lo que compartes en ella, si aun así la gente quiere incitarte a la contienda, pídeles que dejen de seguirte o leerte. 

Nadie está en la obligación de aceptar, creer o apoyar lo que decimos o pensamos, pero tampoco tiene derecho a querer mandar en lo que hacemos o a darnos directrices de cómo usar nuestras redes sociales. Vivamos en paz y en amor y vamos a darle a las redes sociales el uso correcto, seamos canal de bendición para quienes nos rodean. 

Dejemos el barrio atrás, que eso no deja...

                                                                                                                           Alfonsina Silverio Sosa.