Participación política de las mujeres en RD

Por Yorlenni Sánchez 💫✨👩💕👣

17 de mayo del 2018

Con el devenir de los años, las mujeres dominicanas han roto múltiples parámetros en términos profesionales, accediendo a áreas diversas de las que se pensaba no podían participar, incluyendo una de las más desafiantes: la política. Hoy día, está más que claro que el reconocimiento del derecho que tienen las mujeres de participar en los espacios de liderazgo y toma de decisiones es una cuestión de derechos humanos que se promueve no únicamente desde la Constitución de la República, sino mediante los diversos instrumentos internacionales de los que somos signatarios.

Desde la lucha independentista de 1844 las mujeres dominicanas han venido teniendo presencia en la política. No obstante, uno de los ejemplos más importantes de nuestra historia sobre el tema en cuestión es precisamente el involucramiento político de las mundialmente reconocidas Hermanas Mirabal, mujeres que lucharon de manera impresionante contra el régimen de Rafael Leonidas Trujillo Molina, dictador que gobernó la República Dominciana por 31 años (1930 - 1961) y que se caracterizó por constantes violaciones de derechos humanos, incontables asesinatos y opresión generalizada.

Fueron estas tres mujeres (Patria, Minerva y María Teresa) las activistas que guardaron su dignidad ante las amenazas de una de las dictaduras más sanguinarias en América Latina y decidieron hacerle frente a la inestable situación por la que atravesaba el país producto de este sistema dictatorial en una época con marcadas desigualdades sociales y de género. Aunque su lucha les costó la vida en 1960, sus aportes al desarrollo de la democracia nacional aún siguen siendo valorados.

NOTA: en honor a ellas, la Asamblea General de las Naciones Unidas declaró en 1999 el 25 de noviembre como "Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer", convirtiéndolas en un signo global contra la violencia de género.

Desde que la mujer dominicana ejerció por primera vez el sufragio en el año 1942, su participación política ha sido creciente y constante. Como consecuencia, el coraje y la valentía de las féminas para hacerse presentes en la política se ha visto reflejado en mujeres que se han convertido en Vicepresidentas de la República, tales como Milagros Ortiz Bosch (2000 - 2004) y Margarita Cedeño de Fernández (2012 -2016 y reelecta para el mismo cargo para el período 2016- 2020). Si bien hasta el momento no hemos tenido una Presidenta de la República, ya dos aspiraron a dicha posición: Minou Tavárez Mirabal y Soraya Aquino. Quizás para muchos es no creíble e imposible que una mujer pueda llegar a ser Presidenta de la República Dominciana, porque entienden que ellas están hechas para realizar tareas privadas, delicadas y que no impliquen exhibicionismo, pero lo cierto es que esta posibilidad no está lejos de ser real.

Antes de la implementación de medidas afirmativas, la participación de las mujeres en los cargos de elección popular en la República Dominicana fue muy mínima. Por citar el caso particular de las elecciones de 1994, el porcentaje de las mujeres electas en la Cámara de Diputados fue de tan sólo un 12.5%. Fue entonces cuando los propios partidos politicos reconocieron en la década de los 90 el 25% de la cuota femenina, y que posteriormente se formalizó con la reforma electoral del 1997 a través de la Ley Electoral 275-97 y aumentado a un 33% en el 2000 mediante la Ley 12-2000, que estas cifras aumentaron: en las elecciones de 1998 la mujer alcanzó una representación de un 16.1% en el Congreso Nacional, un 20.8% en las del 2010 y un 25% en las del 2016.

Según datos de la Junta Central Electoral, en las elecciones del 2016 unas 3 mujeres fueron electas para Senadoras y unas 50 para Diputadas. Por otro lado, 20 mujeres lograron convertirse en Alcandesas Municipales y 3 en Vicealcaldesas. De los 22 Ministerios de la administración del país, unos 4 son liderados por mujeres. Así mismo, el Observatorio de Participación Política de las Mujeres señala que las candidaturas propuestas por las mujeres para diferentes cargos en las elecciones del 2016 fue de un 44%. Uno de los factores que incidió favorablemente en el aumento de la participación política femenina es, entre otros, la cuota de candidaturas que se implementa en el país y que ha ido aumentando de manera progresiva.

Si bien estos avances son positivos, todavía estamos lejos de alcanzar una representación equivalente a la cantidad de mujeres que ejercen su derecho al voto, pues en la actualidad ellas conforman alrededor del 50% del padron electoral. Sin embargo, la Carta Magna del 2010 propició las condiciones para alcanzar la Medida afirmativa de paridad, al citar en el Art. 39, numeral 5, que “el Estado debe promover y garantizar la participación equilibrada de mujeres y hombres en las candidaturas a los cargos de elección popular para las instancias de dirección y decisión en el ámbito público, en la administración de la justicia y en los organismos de control del Estado”. En consecuencia, la Junta Central Electoral propuso en el proyecto de Ley de Régimen Electoral que el 50% de las propuestas a cargos electivos fueran ocupadas por mujeres.

No es un secreto que actualmente nuestro país atraviesa por tensas situaciones producto a los altos niveles de femenicidios registrados. Sin embargo, aunque esta problemática ha sido una situación de gran alarma y tensión ciudadana, a su vez ha generado el reconocimiento de los derechos de las mujeres no sólo en lo político, sino en otras facetas de la vida nacional.

En este sentido, como país seguimos apostando por la inclusión, la diversidad y la igualdad de condiciones. Hemos crecido mucho, pero aún nos falta mucho por avanzar...